La caución es una operación de crédito respaldada por valores negociables a corto plazo, ya sea en pesos o dólares, con duraciones que van desde 1 hasta 120 días. Hay dos roles principales en esta operación: el colocador y el tomador. En la primera, el colocador presta dinero al tomador y gana intereses. En la segunda, el tomador pide prestado dinero y ofrece valores negociables como garantía, que son valorados por el mercado. Cuando finaliza el período acordado, el tomador devuelve el dinero prestado y paga los intereses al colocador. Es una operación a plazo fijo respaldada por el mercado.
Se puede invertir en un plazo de 1 a 120 días.
Permite conocer desde el inicio el retorno de la inversión.
La operación está respaldada por los títulos que entrega el tomador como garantía de pago.